La iglesia de Tiatira – Advertencia de no tolerar el pecado

La iglesia de Tiatira

• La iglesia de Tiatira se encontraba en la provincia romana de Asia, en lo que hoy es la parte asiática de Turquía.

• El nombre de Tiatira significa “sacrificio continuo”.

• La ciudad de Tiatira estaba construida en una posición estratégica para el comercio.

• La carta a la iglesia de Tiatira no menciona ninguna persecución sobre los cristianos.

• El remitente de la carta es el Señor Jesucristo, quien se refiere a sí mismo como el Hijo de Dios.

• El mensaje de la carta es de advertencia y corrección por tolerar la falsa enseñanza y la inmoralidad en la iglesia.

• El Señor promete autoridad y recompensa a los que venzan y guarden sus obras hasta el fin.

• Dios conoce todas las obras, el amor, la fe, el servicio y la paciencia de la iglesia de Tiatira.

• Las últimas obras de la iglesia de Tiatira fueron mejores que las primeras.

• Las obras de los creyentes deben mejorar a medida que crecen y se desarrollan en la fe.

El problema de la tolerancia al pecado

• La iglesia de Tiatira toleraba a una mujer que enseñaba y seducía a los siervos de Dios a fornicar y a comer cosas sacrificadas a los ídolos.

• Dios no tolera la maldad en medio de su pueblo.

• El sacerdote Elí permitió que sus hijos deshonraran el sacerdocio robándose las ofrendas y fornicando en el templo.

• Dios reprendió a Elí por no estorbar a sus hijos.

• Dios le dice a Elí que será castigado por no impedir los pecados de sus hijos.

• El Señor elogia las virtudes de la iglesia de Tiatira, pero también les advierte sobre su tolerancia al pecado.

• El Señor no tolera el pecado y lo ve como una rebelión.

• El proyecto de santidad de Dios para nosotros no es una ecuación de sumas y restas, sino un proceso de crecimiento y avance.

Jezabel y los falsos profetas

• La iglesia de Tiatira tenía un problema de tolerancia al pecado, específicamente con una mujer llamada Jezabel que enseñaba doctrinas falsas y seducía a los siervos a fornicar y comer cosas sacrificadas a los ídolos.

• El Señor acusa a Jezabel de dos cosas: tolerar las enseñanzas perversas de esta mujer y seducir a los siervos a fornicar y comer cosas sacrificadas a los ídolos.

• El Señor advierte a la iglesia de Tiatira que si no se arrepienten y se apartan de sus pecados, serán castigados.

• Dios reprueba a los que profetizan en su nombre sin autorización en el antiguo testamento.

• En la antigüedad, los falsos profetas eran despeñados.

• El pecado de Jezabel consistía en enseñar doctrinas contrarias a la palabra de Dios bajo su autoridad.

• La Biblia exhorta a examinar todas las enseñanzas para comprobar que estén de acuerdo con la verdad.

• Dios advierte que los falsos profetas deben ser muertos por aconsejar rebelión contra Él.

• Hoy en día abundan los falsos profetas y apóstoles que no temen a Dios.

• La gente debe ser como los bereanos y escudriñar las Escrituras para no ser engañados.

La fornicación espiritual y la idolatría

• Jezabel también seducía a los siervos y siervas de Dios para que fornicaran y comieran cosas sacrificadas a los ídolos.

• La fornicación espiritual puede conducir al pecado de la inmoralidad sexual.

• Elías desafió a los profetas de Baal en el monte Carmelo para demostrar quién era el verdadero Dios.

• El espíritu de Hegel operó en el tiempo del profeta Elías, manipulando a los líderes de la iglesia e introduciendo falsas enseñanzas.

• Pablo, en 1ª Corintios 8:4-6, aclara que lo ofrecido a los ídolos no es nada, ya que no son dioses reales.

• Comprar y comer carne de animales sacrificados en templos paganos no es pecado, pero se convierte en pecado si provoca conflicto en alguien débil en la fe.

• Participar públicamente en banquetes donde se sirve comida sacrificada a ídolos es pecado.

• Pablo establece principios para discernir si participar o no en ciertas actividades: si es bueno para uno, si edifica o no, si te domina o no, si disminuye el control de Jesucristo sobre uno, y si es propio de un discípulo de Jesucristo.

El cuerpo como templo del Espíritu Santo

• El cuerpo de un cristiano es templo del Espíritu Santo y debe ser glorificado a Dios.

• Dios nos pregunta si nuestras acciones glorifican su nombre o no.

• Debemos considerar si nuestras acciones pueden influir negativamente en otros hermanos en Cristo o hacerlos tropezar.

• También debemos pensar en cómo nuestras acciones afectarán nuestro testimonio y lo que otros dirán de nosotros como hijos de Dios.

• El apóstol Pablo nos advierte que no nos engañemos a nosotros mismos y que no generemos argumentos para discutir en contra de lo que el Espíritu Santo nos habla a través de la Palabra y nuestra conciencia.

• Si algo está mal, debemos ser humildes, reconocerlo y buscar la ayuda del Espíritu Santo para quitarlo de nuestras vidas.

El juicio de Dios y la recompensa

• Dios es paciente y misericordioso, y nos da tiempo para arrepentirnos, pero si no lo hacemos, enfrentaremos su juicio.

• El juicio de Dios sobre Jezabel y sus aliados fue severo, y trajo efectos sobre la iglesia.

• Dios está en contra de todo lo que haga tropezar a su iglesia y no se arrepienta.

• El juicio de Dios sobre los que siguen falsas doctrinas puede manifestarse en enfermedades o muerte.

• Aquellos que venzan y guarden las obras de Dios hasta el fin recibirán autoridad sobre las naciones y la estrella de la mañana.

El remanente fiel y el crecimiento espiritual

• El Señor elogia al remanente fiel en la iglesia de Éfeso que no se contaminó con la doctrina de Jezabel ni con las profundidades de Satanás.

• Hay creyentes que tienen más preocupación por conocer el mundo del ocultismo y el satanismo que la Biblia.

• Algunos se meten tanto en el tema de la guerra espiritual que descuidan su relación con Dios, el prójimo y la iglesia.

• El crecimiento espiritual debe ser progresivo y manifestarse en las obras.

• Dios conoce todo y escudriña el corazón, por lo que no debemos hacer oídos sordos a sus correcciones.

• La misericordia de Dios es grande, pero no debemos abusar de ella.