La Importancia del Orden // Clase de Discipulado
La Importancia del Orden
El orden es fundamental en la vida de un cristiano, ya que Dios es un Dios de orden. Los padres deben enseñar a sus hijos desde pequeños la importancia de ser ordenados, lo que fomenta el respeto y mejora su capacidad para manejar sus tareas cotidianas. “Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él” (Proverbios 22:6).
El Orden en la Vida Diaria
Un ambiente ordenado facilita el trabajo y ahorra tiempo. Muchas personas pierden tiempo buscando cosas en desorden, lo que refleja la necesidad de establecer un orden tanto en la vida personal como en la vida espiritual. “Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora” (Eclesiastés 3:1).
La Relación con Dios y el Orden
El orden no solo se aplica al entorno físico, sino también a la relación con Dios. Es crucial tener una vida ordenada en todos los aspectos, incluyendo el cuerpo, alma y mente. La falta de orden puede llevar a problemas de salud y dificultades en las relaciones. “Porque Dios no es Dios de confusión, sino de paz” (1 Corintios 14:33).
La Experiencia de Ezequías
Se presenta el ejemplo del rey Ezequías, quien recibió un mensaje del profeta Isaías para que ordenara su casa porque iba a morir. “Ordena tu casa, porque morirás, y no vivirás” (2 Reyes 20:1). Ezequías se quebrantó, oró y Dios le dio una prórroga de quince años de vida. Esto muestra que el orden espiritual es esencial para recibir la gracia y la intervención divina.
La Necesidad de Reflexionar y Orar
Es importante llevar nuestras quejas y preocupaciones a Dios, especialmente cuando enfrentamos desafíos en nuestro ministerio o vida personal. “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias” (Filipenses 4:6-7). Dios valora nuestra sinceridad y nuestro deseo de crecer en fe y orden.
Es vital que cada uno examine su vida y su relación con Dios. El orden debe estar presente en todas las áreas: personal, familiar y espiritual. La búsqueda del orden nos lleva a una vida más plena y a una mayor eficacia en el servicio a Dios y a los demás.
Una Comida Diferente
La predicación inicia con una analogía sobre una comida a base de arroz y mango, destacando la abundancia de estos alimentos y su disponibilidad. Se relaciona esto con la necesidad de poner el camino espiritual en orden.
Preparación para el Matrimonio
Se enfatiza que las pasiones románticas entre cristianos pueden ser peligrosas. Se menciona el cuidado que se debe tener en el noviazgo y cómo, a veces, es necesario frenar relaciones hasta que estén alineadas con la voluntad de Dios.
El Orden de Dios
Se menciona cómo Dios establece el orden en la creación, separando la luz de las tinieblas. “Y dijo Dios: ‘Sea la luz’; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena” (Génesis 1:3-4). Este orden divino se refleja en nuestras vidas y en nuestras decisiones.
Consecuencias del Desorden
El desorden en la vida lleva a fracasos y miseria. Cita a Benjamín Franklin sobre cómo el desorden conduce a la pobreza y la miseria. Se enfatiza que el desorden es un obstáculo para la vida espiritual y el éxito personal.
La Sabiduría de Dios
Se habla de cómo Dios quiere otorgar inteligencia y sabiduría divina a sus hijos para que puedan tomar decisiones ordenadas en todos los aspectos de la vida: alimenticio, financiero, emocional y espiritual. “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche” (Santiago 1:5).
La Importancia de la Autoridad y el Consejo
El orden también implica autoridad. Se anima a que los padres sean consejeros de sus hijos para formar una personalidad ordenada. “Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor” (Efesios 6:4). Se menciona la necesidad de dar y seguir órdenes en la comunidad y la iglesia.
Diversidad de Dones y Ministerios
Se abordan los diferentes dones del Espíritu Santo y cómo deben ser utilizados de manera ordenada dentro del cuerpo de Cristo. “Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo” (1 Corintios 12:4). Se destaca que cada miembro tiene su función, y que el orden en el uso de los dones es fundamental para la edificación de la iglesia. “A fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo” (Efesios 4:12).
La Necesidad de un Orden Ministerial
Se enfatiza la importancia de un orden adecuado en los ministerios de la iglesia. Se menciona cómo algunos evangelistas no son llamados a ser pastores y el peligro de no reconocer los llamados de Dios para cada individuo.
Conclusión: Ser Santos Ordenadores
Finalmente, se concluye que los hijos de Dios son llamados a ser “santos ordenadores”, utilizando sus dones para edificar la comunidad y la iglesia, manteniendo siempre un enfoque en el orden divino.
Presidente de la ONG Remar Internacional y la iglesia Cuerpo de Cristo.