La Palabra para Hoy – Apocalipsis 21:4

Lectura bíblica: «Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá más muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas ya pasaron.» — Apocalipsis 21:4

Reflexión:

Hace algunas décadas, el mensaje del cielo era una llama encendida en el corazón de los creyentes. Se hablaba con pasión de las moradas eternas, de las calles de oro, del lugar donde no habrá llanto ni dolor. Ese fue el mensaje que conquistó mi corazón adolescente: una esperanza que trascendía mis frustraciones y vacíos.

Hoy, pareciera que se predica menos sobre la eternidad. El mensaje ha sido cubierto por lo inmediato, por lo material. Muchos han puesto sus esperanzas en lo terrenal, y han perdido el anhelo de la patria celestial. Pero el mensaje de Jesús no ha cambiado. Sigue siendo el mismo: hay un lugar mejor, preparado por nuestro Salvador, donde Dios mismo enjugará nuestras lágrimas.

En este mundo seguimos viendo injusticias, enfermedades, soledad y lágrimas. Pero la proclamación sigue firme: Jesús resucitó para darnos vida eterna. Esa vida no es solo una promesa lejana, es una realidad viva que transforma nuestra forma de caminar en esta tierra.

Aplicación:

Querido proclamador del evangelio, no dejes fuera el cielo de tu mensaje. No ignores la necesidad espiritual de los que sufren, de los que lloran, de los que no tienen nada. Ellos necesitan escuchar que hay esperanza más allá de esta vida. Que hay consuelo, justicia y amor eterno en la presencia de Dios.

El cielo no es un escape, es nuestra herencia. No es una fantasía, es nuestra realidad futura. Y nuestra fe florece cuando recordamos lo que nos espera.

Aliento Final:

Canta con fe: “Hay vida, hay vida en Jesús… yo voy a morar en la patria celestial.”
Proclámalo con certeza: “Porque hay vida, hay vida en Jesús.”

Oración:

Señor, gracias por la esperanza que tenemos en Ti. Gracias porque un día secarás nuestras lágrimas, y no habrá más dolor. Ayúdanos a vivir con los ojos puestos en la eternidad y a compartir este mensaje de esperanza con un mundo que tanto lo necesita. Amén.